lunes, 4 de marzo de 2013



Este Blog ha sido creado por alumnos de 2º de Bachiller de Moratalla con la intención de ayudar a los estudiantes a preparar su prueba de Selectividad. Esperamos que os sirva de ayuda y que os guste.

 DESCARTES


René Descartes (La Hayve, Turena francesa, 31 de Marzo de 1596 -Estocolmo, Suecia, 11 de Febrero de 1650), también llamado Renatus Cartesius, fue un filósofo, matemático y físico francés, considerado como el padre de la geometría analítica y de la filosofía moderna, así como uno de los nombres más destacados de la revolución científica.
Resumen 1ª parte

En este primer fragmento, el tema a tratar es el de la  duda metódica. Descartes está buscando establecer un tipo de filosofía rigurosa, exacta, que pueda ser universalizable, y piensa que se tendría que rechazar todo lo que provocase una duda razonable, deshaciéndose de los prejuicios. Descartes pone de manifiesto que hay que dudar de: los sentidos, los razonamientos matemáticos, la distinción entre sueño y realidad. 
Así llega a la conclusión de que mientras esta dudando, piensa, y es imposible, dudar sin existir. De esta forma llegó a: Pienso, luego soy, primer principio de su filosofía.

Resumen 2ª parte

En este fragmento analiza más profundamente la cuestión de la naturaleza de este yo que piensa. Argumenta, se puede fingir la   existencia de todo lo material, pero no la de  la actividad mental, porque la duda es una actividad  del pensamiento, y aunque el cuerpo no existiese, el alma no dejaría de ser todo lo que es. Puesto que es absurdo pensar que el pensamiento se puede ejercer en abstracto o en el vacío.

Una certeza es una idea que se intuye clara y distinta, por tanto la frase “pienso luego soy” es una certeza. Una cosa es verdadera cuando la percibimos de forma clara y no la confundimos con las demás, esto es, que nuestra mente no se confunde. Utiliza el Cogito ergo sum como  modelo paradigmático, de tal modo, que si encontramos otra proposición que tenga la misma claridad y distinción que éste, podremos considerarla cierta y segura. Esta es la formulación de la primera regla del método, la de la evidencia: no tomar por verdadero, sino lo que se presenta a mi mente de manera clara y distinta

Resumen 3ª parte

En la tercera parte, Descartes reflexiona acerca del hecho de que siendo él un ser imperfecto, (pues la mayor perfección se encuentra en conocer y no en dudar),  como es posible, que pueda concebir la perfección. La respuesta a esto parece hallarse en que dicha idea proviene de una naturaleza que sí es perfecta. Visto esto, aún queda la duda de la procedencia de la idea de perfección y visto que no puede proceder de él, ni tampoco de la nada, sólo queda la posibilidad de remitirse a una naturaleza más perfecta, es decir, a Dios, que la ha puesto en su mente (idea innata).

También, analizando otras verdades, se da cuenta de que un razonamiento lógico, como un desarrollo matemático, puede ser evidentemente correcto, pero que, por otro lado, éste no tiene que existir por necesidad. Dios es tan evidente como lo puede ser un razonamiento matemático, pero en la idea de Dios como ser perfecto se halla comprendida la existencia, porque le es esencial.

2. NOCIONES

2.1 DUDA Y CERTEZA.

         Descartes se propone en el “Discurso del Método” y en las “Meditaciones Metafísicas” encontrar si es posible un juicio absolutamente cierto y esto significa que no pueda ser cuestionada la verdad de lo que afirma ni por las más extravagantes suposiciones de los escépticos.
Una vez determinado el objetivo, Descartes aclara el procedimiento del que se va a servir para determinar si una certeza tal existe o no, a saber: considerar como falso todo conocimiento que se haya tenido por tal en cuanto se puedan encontrar razones para dudar de su verdad.
A partir de aquí se exponen las diversas fases por las que pasa la duda: en primer lugar, se considera como falso el conocimiento de las cosas tal y como nos lo presentan los sentidos en virtud de que en más de una ocasión nos han engañado, como cuando introducimos un palo en el agua y lo vemos quebrarse; aunque los sentidos no nos engañasen siempre, no son una fuente fiable de conocimientos, En segundo lugar, considera las demostraciones matemáticas de las que es posible dudar en cuanto que muchos se equivocan al razonar y nadie puede estar seguro de no ser uno de ellos. En su obra Meditaciones metafísicas da otra razón, a saber: existe la posibilidad de un genio maligno que hubiese creado mi mente de suerte que por más claro que vea la verdad de un juicio matemático, éste pueda ser falso. En tercer lugar, duda no ya de que las cosas sean como nos las muestran los sentidos, sino de que existan de un modo exterior a nosotros, dudando por lo tanto de la distinción entre vigilia y sueño.    

2.2 ALMA Y CUERPO (res cogitans y res extensa).

Alma: Por alma podemos entender la sustancia espiritual, cuyo  atributo esencial es el pensamiento,  mientras que  por  extensión (cuerpo) entendemos la sustancia corpórea. En tanto la sustancia infinita se corresponde con Dios.

Descartes considera que el alma está separada del cuerpo. Afirmar la unidad sustancial alma-cuerpo significaría reducir el alma a materia. De tal modo que Descartes se ve obligado a afirmar que  el alma está en una esfera autónoma e independiente de la materia. Esta independencia del alma respecto al cuerpo es una idea central de la filosofía cartesiana. Para Descartes el alma y el cuerpo no son una sola sustancia. El alma está constituida por el pensamiento, como una cosa completamente distinta del cuerpo y que no necesita de él para ser, puesto que su ser es el  pensar.
En el ser humano, según Descartes, el alma está unida al cuerpo a través de la glándula pineal, localizada en el cerebro. El alma puede existir independientemente del cuerpo porque no lo necesita para pensar. Si bien,  el problema es que si el cuerpo y el alma pueden darse por separado
Descartes cree que el cuerpo debe entenderse como materia constituida por la extensión. Según él, los cuerpos son realidades extensas.
Encontramos así pues dos líneas de pensamiento: distinción entre alma y cuerpo expuesta en el Discurso del método  y la que acepta y trata de explicar la interacción y la unidad total del hombre, expuesta en las Meditaciones Metafísicas.

2.3. PENSAMIENTO E IDEAS.

Por pensamiento,  entendemos de modo general, a un acto mental de tipo cognoscitivo. Sin embargo, Descartes se refiere con esta palabra a todo contenido mental, a todo lo que se encuentra en la mente.
Tenemos ya una verdad absolutamente cierta: la existencia del Yo como sujeto pensante.  Esto es el hecho del pensamiento y, por consiguiente, de la existencia, pues aunque puedo dudar de todo, no puedo dudar de que esté dudando; no puedo dudar de mi pensamiento, y si pienso, es porque existo. Esta existencia indubitable del yo no parece implicar, sin embargo, la existencia de ninguna otra realidad. En efecto, aunque se piense, tal vez el mundo no exista en realidad; lo único que es cierto es que yo pienso que el mundo existe.
Tenemos por un lado, el pensamiento como actividad (yo pienso) y por otro, las ideas que piensa.
Las ideas son aquellas cosas que podemos pensar y que están en nuestra mente. Se pueden clasificar según varios criterios. Por un lado estarían las ideas verdaderas y falsas, según su adecuación a la realidad; según el criterio de verdad podemos diferenciar las ideas claras o indudables y las ideas confusas; y finalmente según su origen, podemos diferenciar por un lado las ideas adventicias, que son aquellas que parecen provenir del exterior, pues coinciden con la realidad que percibimos con los sentidos. Ej: el Sol, los árboles, los hombres… sin embargo, su existencia es dudosa, ya que las conocemos a través de los sentidos; por otro lado las facticias, producidas por la imaginación, y las cuales no corresponden a la realidad (por ello éstas serían falsas), como la idea de hada o quimera; y finalmente las ideas innatas, que son aquellas que ya se encuentran en el alma o la mente y que han sido puestas en nosotros por Dios.

3.           Temas.

3.1.       EL COGITO Y EL CRITERIO DE VERDAD.

Una vez que Descartes tiene la certeza del sujeto pensante y el criterio general de certeza, es preciso indagar si existe alguna otra realidad de la cual no quepa dudar y para ello utiliza el principio de causalidad que aplica a las ideas. La cuestión que plantea Descartes es si el sujeto pensante puede ser la causa de todas las ideas que están en su mente. Concluye que el sujeto pensante es la causa de todas las ideas que están en su mente, excepto de la idea de Dios

El criterio cartesiano de verdad está ya formulado en la primera regla del método: podré estar seguro de que un conocimiento es verdadero cuando lo perciba clara y distintamente, esto es, de tal modo que no puede dudar de su verdad

En pocas palabras, renovó la filosofía gracias al racionalismo
El cogito es la primera verdad en el orden del conocimiento, que tiene dos sentidos: por una parte es la primera verdad a la que llegamos cuando hacemos uso de la duda metódica, y en segundo lugar podemos fundamentar a partir de ella todas las demás.
La hipótesis del genio maligno no anula la certeza que uno tiene de su propia existencia. La existencia de un Dios bondadoso es la garantía definitiva o última del criterio de verdad.
La necesidad de un método en Descartes era una verdadera obsesión, convencido de la certeza y seguridad de las matemáticas, quería emplear en su filosofía un método que condujera a la misma seguridad. La razón está controlada por el método y éste funcionará bien usando correctamente las cuatro reglas: La evidencia es el criterio de verdad. La evidencia se define por sus dos caracteres esenciales: La claridad y la distinción. El resto lo constituye el análisis, la síntesis y la enumeración.
3. 2. LAS DEMOSTRACIONES DE LA EXISTENCIA DE DIOS.



Las pruebas que expone Descartes para demostrar la existencia de Dios son:

-          La primera parte de la idea innata de infinito de una sustancia eterna, inmutable y omnisciente. A partir de todo esto las cosas existen ya que han sido creadas y producidas por algo o alguien. Además, la causa de la idea de infinito ha de tener tanta perfección como la idea, por lo que el ser humano no puede ser el causante. La causa ha de ser infinita. Por tanto la conclusión extraída es que Dios es la causa de la idea de infinito que posee el sujeto pensante.

-          La segunda está basada en la idea de que el sujeto pensante no puede ser la causa de sí mismo. Si afirmamos esto, tendríamos que aceptar que recoge y aúna todas las perfecciones conocidas, tales como la eternidad. Sin  embargo apreciamos que el ser humano es finito e imperfecto, por lo que ha de existir un ser que sea el creador del ser humano y se conserve en la existencia, sea perfecto. Este es Dios.

-          La tercera explica la existencia de Dios según la 5ª Meditación y parte de la prueba de San Anselmo (prueba ontológica).  Se basa en que la esencia del ser perfecto contiene la existencia, por tanto sería imposible decir que el ser perfecto no existe, al igual que es imposible afirmar que un rectángulo no tiene un ángulo recto.

4. CONTEXTUALIZACION:

Descartes nace en 1596 y muere en 1650, su filosofía se desarrolla a lo largo del siglo XVII.
El texto pertenece la cuarta parte de la obra “El discurso del método” (1637). En la cuarta parte, cuenta las conclusiones metafísicas a las que llegó durante su periodo de recogimiento; dudo, de todo lo que no tenia por que ser cierto, hasta descubrir una verdad irrefutable: “pienso, luego existo”. Unos años después publica las “Meditaciones metafísicas” en las que se demuestra la existencia de Dios y la inmortalidad del alma.
El siglo XVII se caracteriza por absolutismo, contrarreforma, barroco, y el triunfo de la nueva ciencia.

Destacamos a San Agustín de Hipona, por su pensamiento de Dios como causa de la idea de infinito y del ser del sujeto. Descartes, influenciado por él, piensa que si se niega que Dios sea la causa de la existencia del sujeto, habrá que admitir que el sujeto es causa de sí mismo. Pero, en tal caso, se habría dotado con todas las perfecciones que conoce y que están contenidas en la idea de infinito. Puesto que comprobamos que el sujeto es un ser finito, imperfecto y limitado, no puede haber sido su propia causa y, consiguientemente, debemos concluir que Dios es su causa.

La idea de la existencia de Dios como Ser perfecto proviene de San Anselmo de Canterbury y es conocida con el nombre de prueba ontológica. Descartes viene a decir que la esencia del Ser perfecto contiene la existencia y que, por ese motivo, no es posible pensar el Ser perfecto como no existente, del mismo modo que no se puede pensar un triángulo que no tenga tres ángulos. Por tanto, el Ser perfecto  ha de existir necesariamente.

         En cuanto a la influencia de Platón:

1) Persigue la verdad única, incuestionable, eterna y accesible a la razón humana se parece mucho a la Idea del Bien platónica.
2) La desconfianza en los sentidos como fuente de conocimiento.
3) La consideración de la matemática como paradigma de la ciencia.
4) La necesidad de Descartes de admitir las ideas innatas para justificar el mundo y la realidad, presente en Platón cuando admite la existencia de la verdad en el alma humana en su teoría de la reminiscencia


Muchos temas de Santo Tomás tienen una presencia en Descartes, que utilizó las pruebas tomistas por la causalidad eficiente y por la contingencia, aunque con importantes modificaciones en la demostración de la existencia de Dios.

Hay una gran diferencia entre estos autores en cuanto a la demostración de Dios. Santo Tomás utiliza una argumentación que se llama “a posteriori”, porque parte de la experiencia sensible, concluyendo la existencia de Dios. Descartes demuestra “a priori”, o sea, parte del pensamiento y de las cualidades que definen al mismo Dios.

Por otro lado podemos mencionar a uno de sus detractores: el empirista Hume, quien rechaza tanto la tesis de las ideas innatas como la de que la fuente máxima de conocimiento resida en la razón y no en la experiencia, como el sugiere.
Entre las  influencias posteriores: la principal aportación de Descartes a la filosofía posterior es el haber colocado el cogito al sujeto pensante. Con ella imprime un giro a la filosofía moderna que influirá en gran medida en la filosofía posterior, presente en filósofos como Espinoza, Locke, Leibniz, Kant, Hegel, Husserl y Sartre.
Ahora vamos a analizar las influencias de Descartes en algunos de ellos:
Espinoza, partiendo de la innegable influencia de Descartes, creó un sistema muy original, con mezcla de elementos propiamente escolásticos y estoicos.

La influencia de Descartes en Hegel se encuentra sobre todo en el estudio del alma y su carácter espiritual, en la investigación sobre la verdad, la visión de las cosas en Dios y las relaciones entre alma y cuerpo.

         Y por último en Husserl es innovador en filosofía por su fenomenología. La fenomenología es un método trascendental en cuanto que somete a la propia vida a la reducción fenomenológica.







Hume

David Hume (Edimburgo, 7 de Mayo de 1711 – ibídem, 25 de Agosto de 1776) fue un filósofo, economista, sociólogo e historiador escocés y constituye una de las figuras más importantes de la filosofía occidental y de la Ilustración escocesa.




Resumen primera parte:
El tema general es la investigación del origen del conocimiento y los límites de éste. Hay que distinguir entre impresiones e ideas, las impresiones es cuando la mente siente algo como dolor o placer. Las ideas es cuando la mente evoca esas sensaciones, pero no las percibe de la misma forma que cuando realmente se siente


Resumen segunda parte:
En esta parte se cuestiona como es posible que la experiencia ponga los límites del pensamiento. Para Hume, no hay nada mas ilimitado que el pensamiento, podemos crear cualquier cosa, se puede imaginar lo que nunca se ha visto, etc.

Sin embargo, nos damos cuenta de que el pensamiento esta limitado ya que nos centramos en mezclar, modificar… las sensaciones que percibimos, un ejemplo de esto es una sirena, es una mezcla de un pez y una persona, nunca la hemos percibido, pero la a creado nuestra imaginación. Lo mismo ocurre con Dios, a partir de los conocimientos de bondad, infinitud, sabiduría, etc. Obtenemos el concepto de Dios.
Una persona que carezca de algún órgano, carece de algún sentido y es imposible que perciba alguna idea relacionada con ese sentido.


Nociones:

1.1 Impresiones e ideas
Hume piensa que cualquier contenido de la mente es una percepción, como la sensación de un color. En general, las percepciones se dividen en impresiones e ideas, las impresiones esta en la mente, y las ideas es cuando recuerdas algo gracias a la memoria.
En su obra “Tratado de la naturaleza humana” estable una distinción entre percepciones simples y complejas, una simple es una mancha roja, y ver la imagen de una ciudad desde lo alto de una montaña es una percepción compleja
Las percepciones también se pueden dividir en impresiones de sensación y de reflexión, las primeras surgen a la mente por desconocimiento, las de reflexión son posteriores a las ideas de sensación y derivadas de éstas.
Las ideas también pueden ser de dos clases: de la memoria y de la imaginación: las primeras son mas fieles al orden y la forma de impresiones originales, las segundas trastocan su orden y forma de aparición.
Según Hume los principios a partir de los cuales las ideas se asocian son tres: semejanza, contigüidad y causa y efecto.
Existen dos tipos de conocimientos para Hume: las relaciones entre ideas, y las cuestiones de hecho, las relaciones entre ideas se caracterizan porque sus proposiciones son verdaderas (el álgebra). Los razonamientos acerca de cuestiones de hecho son razonamientos causales y se fundan en la costumbre o hábito a partir de la experiencia.

1.2 Límite del pensamiento y principio de copia.
Una vez establecida la distinción entre impresiones e ideas, Hume se pregunta si el pensamiento del hombre tiene algún límite, encuentra dos límites: lo que encuentra contradicción absoluta, y todas nuestras ideas o percepciones mas endebles, son copia de nuestras impresiones o percepciones mas intensas. Lo cual nos conduce al concepto principio de copia que nos dice que todas nuestras ideas son copias de impresiones.
Hume pretende probar este principio con dos argumentos: primero todas nuestras ideas por complejas que sean, se resuelven en ideas simples, pero a cada idea simple corresponde una impresión simple y a cada impresión simple, una idea simple. Así, todas las ideas no pueden tener otro origen que no sea la experiencia. La idea de Dios tiene su origen en la experiencia que tenemos de la inteligencia, sabiduría y bondad de los hombres. En segundo lugar, si el hombre no puede captar alguna sensación, es incapaz de las ideas correspondientes.
Sin embargo, hay una excepción a la regla general de que las ideas derivan de las impresiones correspondientes.

Síntesis

Tema: la experiencia como origen del conocimiento.
El empirismo es la corriente filosófica dentro de la cual se sitúa el pensamiento de Hume, y constituye una reacción contra el racionalismo. Destacan: Aristóteles, Guillermo de Ocán, etc. El empirismo se caracteriza por el rechazo radical de innatismo.
Con anterioridad a la experiencia, nuestro entendimiento es como una pagina en blanco. La experiencia es así, fuerte y limite del conocimiento.
El problema epistemológico para el empirismo es el genético psicológico que consiste en averiguar la génesis del conocimiento.
La percepción externa nos permite el conocimiento del mundo exterior y la percepción interna el conocimiento de nuestra mente.
Según Hume, de la experiencia y las percepciones proceden todos los contenidos de la mente. Estos contenidos mentales se dividen en impresiones, que son sensaciones inmediatas, y en ideas o pensamientos, que son Menos intensos y surgen de las impresiones. Hay tres leyes de asociación de las ideas que son:
-Ley de semejanza, que consiste en pasar de una idea a otra semejante
-Ley de la contigüidad espacio-temporal: si tomamos la idea de un objeto, la mente tiene a recorrerlos de forma continua
-Ley de la causa-efecto: cuando contemplamos un acontecimiento (efecto), inmediatamente pensamos en la cusa que lo a producido
Hay dos tipos de objetos de la razón: las ciencias como la Geometría, Álgebra, etc, o las cuestiones de hecho que no pueden ser investigadas de la misma manera.
Si estamos convencidos de que un hecho ha de producirse de una determinada manera, es porque la experiencia nos lo ha presentado siempre asociado a otro hecho que lo precede o le sigue.
Hay dos tipos de conocimientos: el conocimiento de relaciones de ideas, y las cuestiones de hecho: en el primero, el conocimiento depende de las operaciones del entendimiento reguladas por el principio de contradicción, en el segundo caso, las cuestiones de hecho, el conocimiento esta basado en las impresiones.
El principio de casualidad sólo tiene valor aplicado a la experiencia, aplicado a objetos de los que tenemos impresiones, y por lo tanto sólo tiene valor aplicado al pasado.

Tema: la crítica de los conceptos metafísicos.
Hume se plantea si la distinción entre impresiones e ideas y el principio según el cual toda idea se deriva de una impresión, tiene alguna utilidad y efectivamente la tiene, y si se usa apropiadamente, podría hacer igualmente inteligible cualquier disputa y desterrar toda esa jega que se apoderado de los razonamientos metafísicos. Gracias al principio establecido, es posible que crítica de la metafísica que sirva para distinguir “la verdadera” de “la falta adulterada”
Hay distintas razón que intentas afirmar la existencia de Dios:
1) Critica de la idea según la cual la relación entre la cusa y el efecto se funda en una conexión necesaria. Todos los razonamientos acerca de cuestiones de hecho. Es un tiempo de conocimiento donde no implica contradicción ya que es posible la negación de sus afirmaciones
2) Crítica de las ideas de sustancia material, critica la idea de sustancia en la que los filósofos fundan en gran medida sus razonamientos. Consideramos la idea de una sustancia material, si entendemos por ésta la existencia externa de un cuerpo como algo específicamente diferente de nuestra percepción.
3) Crítica de la idea según la cual el yo es una sustancia en la que se dan las percepciones. Otra de las ideas oscuras en metafísica es la idea de yo, de sujeto como una sustancia material o espiritual en la cual inciden las percepciones y por lo cual sustancia y percepciones son distintas.
4) Crítica de las pruebas para la demostración de la existencia de Dios. Por ultimo, es preciso ocuparse de los razonamientos metafísicos que pretenden  probar la existencia de Dios. Afirma Hume que el único argumente que merece ser tenido en cuenta es el que se basa en el orden del universo: “Este argumento va de los efectos a las causas”



Contextualización.
Hume nació el 26 de abril en 1711, y murió en 1776. Es una gran figura del empirismo clásico, heredero de Locke, muy influenciado por Berkeley.  El empirismo se considera la reacción contraria al racionalismo. Vivió en el siglo de las Luces, por lo que pertenece a la filosofía moderna. Hume se a ocupado de las cuestiones morales, estéticas, políticas y religiosas.
-En cuanto a las cuestiones morales, se ocupó de ellas en Tratado de la naturaleza humana e investigación sobre principios de la moral
-Se ocupo de la cuestión estética en una de las cuatro disertaciones.
-En lo referente a lo político, encontramos Ensayos morales y políticos.
-Finalmente, relacionado con la religión, se ocupó de ella en los Diálogos sobre religión natural.

Las influencias sobre Hume son:
-Aristóteles y Hume encuentran en los sentidos y sus percepciones una forma legítima de conocer la realidad hic et nunc, que es lo más importante
-Santo Tomas coincide con Hume en el hecho de que el conocer humano sólo es posible mediante un volverse del entendimiento hacia los datos de la fantasía
-El pensamiento de Hume es contrario al de Platón porque para Hume no existe una instancia superior desde la que se contempla la realidad
-Con Loke tiene en común su epistemología, ya que ambos se basan en la experiencia (teoría del conocimiento) no cree en la existencia del innatismo y el determinismo considerando el conocimiento de origen sensorial, por lo que rechaza la idea a favor de la probabilística matemática.
-Hume desafió el principio de causalidad de Descartes. Se dio cuenta de que aunque percibimos que un elemento suceda al otro, no percibimos ninguna condición necesaria y suficiente entre los dos.
-Por ultimo, debemos mencionar a Wittgenstein y Kant, que siguieron los pasos de
Hume en su pensamiento.

Hume fue denominado el “profeta de la revolución de Ludwing Wittgenstein”, al referirse a su consideración de que la matemática y la Lógica son sistemas cerrados, ciencias que no tienen relación con el mundo de la experiencia. La Lógica establece cuál es el limte del lenguaje, del pensamiento y del mundo, y de ese modo se muestra el propio límite que no pertenece al mundo.
La lectura de Hume despertó a Kant de su sueño dogmático (racionalista).






SANTO TOMÁS DE AQUINO


Tomás de Aquino, fue un teológico y filósofo católico perteneciente a la Orden de Predicadores, el principal representante de la tradición escolástica, y fundador de la escuela tomista de teología y filosofía. 
Es considerado santo por la Iglesia Católica. Su trabajo más conocido es la Suma Teológica, tratado en el cual pretende exponer de modo ordenado la doctrina católica. 



Primera Vía
Habla del movimiento que se observa por los sentidos. Para demostrar la existencia de Dios, Sto Tomás parte del hecho que hay movimiento en el mundo. Define el movimiento como el paso de potencia al acto. Todo lo que se mueve es movido por otro, negando el automovimiento. El primer motor que no es movido por nadie, y que causa el movimiento de los otros, es Dios.

Segunda vía
Trata de la demostración de la existencia de Dios, a partir de la existencia de causas eficientes que tienen un orden ya nada es causa de si mismo, porque sería anterior a sí mismo. Como, no podemos remontarnos al infinito, necesitamos aceptar la existencia de una primera causa, fuente de todas las demás, no causada por nada que es DIOS.

Tercera vía
Parte de que en la naturaleza, hay seres contingentes. Pero, si afirmamos que todos los seres son contingentes, también tenemos que aceptar que hubo un tiempo en el que nada existió. Cualquier ser que existe, viene de otro que ya existía, sin embargo, el primero no pudo ser creado por nadie y  nos creó a los demás. Ese ser es DIOS.

Cuarta vía
Es un hecho innegable que hay unos seres más perfectos que otros. El ser que reúne todas las perfecciones en grado sumo es el máximo ser, que a su vez es  causa de la existencia del resto de los seres. Necesitamos un ser perfecto con el que compararnos. Este ser, responsable de las virtudes de los demás seres es  DIOS.

Quinta vía
Todos los seres naturales, incluso los que carecen de conocimiento, obran para alcanzar un fin, para llegar a su consecución, se debe seguir un proceso de manera ordenada que responda a un plan, no al azar. Necesitamos postular la existencia de otros seres inteligentes que les dirijan hacia sus objetivos. Este ser lo llamamos Dios.

OBJECIONES
1ª Objeción
¿Por qué Dios permite la existencia del mal si es un ser bondadoso?
RESPUESTA
Dios permite la existencia del mal para extraer un bien mayor de él. Esto forma parte de la gran bondad de Dios.

2ª Objeción
Todo acto encuentra su razón de ser en unos principios, sin tener que recurrir a Dios. Por lo que no es esencial recurrir a Dios para encontrar la razón de ser las cosas.
RESPUESTA
Las leyes de la naturaleza no pueden explicar por si mismas todos los fenómenos naturales, ya que estos actúan por un fin, y necesitan una primera causa que los dirija, una inteligencia ordenadora, como queda demostrado en la quinta vía,  la cual es Dios.

2. Nociones
Movimiento y Primer motor
En esta primera noción Santo. Está claro que los sentidos nos muestran que en el mundo hay cosas  que cambian, por lo tanto la existencia del movimiento  es innegable y evidente. El movimiento es cuando se está en potencia, y es imposible estar en acto y potencia a la misma vez respecto a lo mismo, ''todo lo que se mueve es movido por otro'' según él por Dios. Este principio se basa en otras dos:
         - Todo lo que se mueve es movido por algo. Sí pues, lo que se mueve o está en potencia, es movida por otro que está en acto. Lo que está en acto es la causa de que otro se mueva y esté en potencia.
Tendremos que aceptar un primer motor, que moverá a todos los demás. Sería imposible afirmar que no hay un primer motor,  pues si no lo hubiese sería infinita, por lo tanto no habría un motor en acto puro que originara el movimiento.  
         - Lo que se mueve no puede ser lo mismo que lo que es movido.

 Causa eficiente primera y ser necesario
         Se relaciona con la segunda y tercera vía. Significa que hay cosas que producen otras y son a su vez producidas. A este punto de partida se aplica el principio de causalidad bajo esta fórmula por lo que no hay nada que pueda ser causa de sí mismo. No podemos remontarnos al infinito en la serie de las causas, por cuanto éstas  producen por cuanto a su vez son producidas. Tiene que haber una causa primera que explica la existencia de todas las cosas y que es ella misma incausada. En efecto, para que un ser sea llamado con propiedad posible en un mundo de duración infinita, alguna vez tuvo que no ser y si todos los seres son contingentes, alguna vez nada fue. Pero entonces nada existiría ahora. Esto último es evidentemente absurdo. Pero ese ser, o tiene la necesidad en sí mismo, o la tiene causada por otro y como es imposible remontarse al infinito en la serie de las causas ha de existir un ser que sea por sí mismo necesario.

Ser perfectísimo e inteligencia Ordenadora
El ser perfectísimo es el que obtiene un grado máximo de conocimiento sobre la bondad, la verdad y la unidad. En el mundo hay entes que se acercan a estas cualidades de forma gradual y poco a poco a este máximo. Debe haber algo que para todos los entes sea la causa de su bondad, su ser y de todas sus perfecciones, y a este algo se le llama Dios. En la quinta prueba para probar la existencia de Dios, Santo Tomás considera a éste como causa del orden del mundo, como una ''inteligencia ordenadora''.  El filosofo hace uso del principio de casualidad: ''Lo que carece de conocimiento no tiende a un fin si no lo dirige alguien que entienda, como el arquero a la flecha''. Por lo tanto, los agentes naturales precisan de una inteligencia ordenadora que los dirija para conseguir sus fines. Estos seres directores no pueden remontarse al infinito, luego tiene que existir necesariamente un ser inteligente por el cual todas las cosas naturales se ordenan a su fin, y a ese ser le denominamos Dios.

Existencia de Dios y existencia del mal
 Sto. Tomas considera que la existencia de Dios no es algo evidente por si mismo- Sin embargo, Tomas nos advertirá de que no podemos deducir una proposición de existencia de una lógica. Propone sus cinco vías que son distintos caminos para remontarse racionalmente hasta Dios, todos los cuales aplican el principio de causalidad. Se basan todos ellos en un hecho de experiencia o fenómeno sensible, y desde ahí, y siguiendo un proceder lógico llegan a la conclusión de que Dios existe, como queda demostrado en las vías. En la consideración de la existencia del mal, afirma, que Dios, por ser el ser perfectísimo no admitiría el mal en el mundo, a no ser que de él  extrajera algún bien. En sentido estricto, Santo Tomás interpretaba la ley natural como la ley moral, y la identificaba con la razón humana que ordena hacer el bien y prohíbe hacer el mal. La ley moral es natural y racional: racional porque es enunciada y dictada por la razón; natural porque la propia razón es un rasgo de la naturaleza humana y porque describe las acciones convenientes para los fines inscritos en nuestra naturaleza.

3. Síntesis
3.1. Teología racional y teología revelada.
Santo Tomás distingue perfectamente entre el conocimiento acerca de Dios que es objeto de la Razón y el conocimiento de Dios objeto de la Fe. La fe, pues, mejora la razón, al igual que la teología lo hace con respecto a la filosofía. Lo cual significa dos cosas: primero que la teología rectifica la filosofía, pero no la substituye. Los artículos de fe solo pueden ser creídos por fe. Sto. Un artículo de fe es la esencia de Dios, lo que Dios es. Por otro lado, la razón se ocupa de investigar los entes, las cosas naturales; para ello parte de los axiomas, como las verdades evidentes en sí mismas, y sus conclusiones se mantienen en el ámbito de lo racional y lo natural.
Se debe encontrar la concordancia entre la razón y la fe.  En tanto que para el agustinismo filosófico no hay separación entre filosofía y teología, entre razón y fe, pues ambas colaboran solidariamente en el esclarecimiento de la verdad: la razón sirve a la fe y la fe ilumina a la razón. La razón sola, sin la fe, no puede alcanzar la verdad. Su máxima expresión es credo ut intelligam. San Anselmo coge el principio agustiniano credo ut intelligam y lo lleva hasta sus últimas consecuencias; no se trata de entender para poder creer  sino de la necesidad de la fe para poder conocer la verdad. Sin fe no se puede alcanzar la verdad.

3.2. Las vías y su estructura lógica
Estructura lógia de las vías
Para este filosofo existen dos clases de demostraciones: una llamada propter quid , en la cual se parte de la idea de algo y se deducen  ciertas propiedades a partir de esta idea. Santo Tomas utiliza otro tipo de demostración llamado quia que parte del principio de causalidad, que se encuentra omnipresente en sus cinco vías. Que presentan una estructura más o menos semejante, que es la siguiente:
·                    Se parte siempre de un fenómeno natural que sea observable por los sentidos.
·                     A este hecho de experiencia se le aplica siempre el principio de causalidad.
·                    Se afirma que es imposible remontarse al infinito en la serie de las causas, ya que si no existiera una causa primera no podrían tener lugar todas las demás y tampoco sus respectivos efectos.
·                    Por último, se llega a la conclusión de que esa causa es Dios.

4. Contextualización
Este texto pertenece a la obra Suma Teológica. El texto esl artículo 3 de la cuestión 2 de la obra titulada “si Dios existe”. En este primer artículo se expone si la existencia de Dios es evidente en si misma, aquí Santo Tomas se opone a que la existencia de Dios está impresa en nosotros por la naturaleza.
Entre los pensadores que influyeron a Santo Tomás demos destacar a Platón ya que  influye de manera directa en la filosofía de Santo Tomás; de él toma la idea de los grados de participación-perfección y Aristóteles que fue el filósofo que mas influyo en la forma de pensar de Santo Tomas.
Otros filósofos que influyeron a Santo Tomás fueron , San Agustín, San Alberto Magno, San Anselmo de Canterbury.
Por otro lado conviene mencionar a aquellos a quienes Tomas de Aquino influye, es decir, cuáles serían sus influencias posteriores: Descartes, Leibniz, Hume, Kant.






 

ARISTÓTELES

Aristóteles (en griego antiguo ριστοτέλης, Aristotélēs) (384 a. C. – 322 a. C.) 
Fue un polímata: filósofo, lógico y científico de la Antigua Grecia cuyas ideas han ejercido una enorme influencia sobre la historia intelectual de Occidente por más de dos milenios.



1. La ciencia

En este texto, Aristóteles habla sobre la ciencia y su estudio. El fragmento versa sobre las virtudes intelectuales, que son 5: el arte, la ciencia, la prudencia, la sabiduría y el intelecto. Utiliza como estrategia para definir la ciencia, la oposición de los contrarios: ciencia frente a opinión. Argumenta que la ciencia es algo verdadero y necesario.
La ciencia se ocupa de lo necesario, que además es lo eterno, ingénito e indestructible. Los conocimientos científicos pueden ser obtenidos a través de dos métodos, la inducción y el silogismo. El silogismo parte de lo  universal, valiéndose del razonamiento, Mientras que la inducción parte de lo particular, y trata sobre las ciencias experimentales como la química y la biología.

2. El arte
En el 2º  fragmento, Aristóteles analiza y entiende el arte como la creación de un objeto. Compara  al arte con  la ciencia;  la ciencia no puede ser de otra manera, el arte sí.  En  contraste al arte, está   la acción. La acción tiene que ver con la ética, mientras el arte con la producción. Para producir algo necesitamos conocer la técnica adecuada, ya que en el caso de no ser así tendríamos una falta de arte; el artista que usa la racionalidad para producir cualquier objeto, es un buen técnico.
En conclusión, el arte es un modo de ser productivo acompañado de razón verdadera, y la falta de arte es un modo de ser productivo acompañado de razón falsa.

3. La prudencia
En este fragmento Aristóteles hace una investigación de la prudencia, para definirla observa el comportamiento de un ser humano prudente, que delibera, y tiene en cuenta las  consecuencias  de sus actos, no actúa por instinto.
Cuando reflexionamos sobre algo, deliberamos, para nuestra  felicidad.   Un hombre prudente no actuaría de forma impulsiva. Este  hombre  elige de principio a fin medios prudentes. Si la acción no es prudente el fin tampoco.
La prudencia se distingue de la ciencia como virtud intelectual porque esta discurre sobre lo necesario por medio de la demostración y la prudencia se ocupa de lo contingente mediante deliberación
A su vez también se diferencia del arte porque éste se ocupa de la producción, cuyo fin es distinto de ella misma, mientras que la prudencia se ocupa de la acción que es un fin en sí misma y de los mejores medios para su realización en cada momento, porque no existe una técnica determinada para ser prudente.
La moderación es la capacidad de escoger aquello que se encuentra en el punto medio  entre el exceso y el defecto. 

2. NOCIONES
2.1. LO NECESARIO Y LA CIENCIA.
La ciencia tiene como método la demostración cuyos resultados son conclusiones de validez universal y su objeto es lo necesario, ingénito e imperecedero que se concreta entre otras cosas en las relaciones cuantitativas (continuas o discretas), principios del movimiento, los astros y Dios.
Reúne estas características: 1) Sólo hay ciencia de lo universal no de lo singular. 2) Es un conocimiento de lo necesario, de “lo que no puede ser de otra manera”. No lo es de lo contingente. 3) Es un conocimiento por las causas. 4) Se puede enseñar 5) Se obtiene por demostración. 6) Es un conocimiento verdadero y cierto como consecuencia de lo anterior.
La ciencia consiste en que a partir de unos enunciados dados puedan obtenerse unas conclusiones. El esquema de demostración más simple es el silogismo. El silogismo parte de lo universal. Un silogismo es un esquema de razonamiento tal que a partir de dos enunciados denominados premisas, que han de estar conectadas entre sí por un término medio y de modo correcto, se puede obtenerse una conclusión, que será una conclusión necesaria. Premisa 2: El silogismo en general es un proceso deductivo ya que extrae verdades particulares de verdades universales.
Hay dos maneras de captar las verdades universales: 1ª La inducción que es un proceso por el que se va de lo particular a lo universal, 2ª La intuición que es la captación pura por el intelecto de los primeros principios. Una visión inmediata. También la podemos llamar evidencia.
La sabiduría es la virtud intelectual más perfecta y reúne la intelección y la ciencia. Se ocupa de lo más excelente porque lo más excelente es lo necesario, eterno y que no cambia.

 2. 2. LA PRODUCCIÓN Y LA ACCIÓN.
El método del arte es la deliberación; su objeto es lo contingente, pero entendido como acción productiva que no es en sí misma su propio fin ya que su fin está en la construcción de algo útil y bello.                  
A diferencia de lo necesario, que sólo puede ser de un modo, lo contingente puede ser de dos maneras: como acción  o como producción. De la primera se ocupa la prudencia y de la segunda el arte.
El arte, por su parte, es una virtud intelectual que consiste en aquel conocimiento que es principio de la producción, de suerte que quien lo posee puede producir bien una cosa.
Aristóteles nos dice que el principio de la producción del artefacto u objeto artístico está en otro, en el artesano que posee el arte y no en sí mismo. Con ello pretende diferenciar el arte de la naturaleza, pues el primero tiene un principio externo de producción y la segunda un principio interno que reside en el propio ser natural.
Seguidamente Aristóteles compara el arte con la tyché que es traducida por azar, pero que significa suerte o fortuna y que es preciso distinguir de lo que se produce to automaton, es decir por azar o espontáneamente. El arte y la suerte o fortuna coinciden en que tienen por objeto lo contingente y se dan de manera accidental o por casualidad. La naturaleza tiene que ver con lo que se da generalmente de manera necesaria y, en cambio, el arte y la suerte tienen que ver con lo contingente o accidental.
Arte y naturaleza coinciden, no obstante las diferencias, en que ambos son procesos teleológicos, orientados a la realización de un fin. Más aún, ambos emplean los mejores medios posibles. Se parecen hasta tal punto en esto, que si una casa, por ejemplo, se pudiera realizar de manera natural, lo haría del mismo modo que como la planea el arquitecto.

 2.3. PRUDENCIA Y MODERACIÓN
Aristóteles explica el prudencia, como sabiduría práctica o sensatez. Se llama sensato o prudente al que reflexiona adecuadamente acerca de las acciones que más le conviene realizar en cada momento. Se distingue de la ciencia como virtud intelectual porque ésta discurre sobre lo necesario por medio de la demostración y la prudencia se ocupa de lo contingente mediante deliberación. Se diferencia también del arte porque éste se ocupa de la producción, cuyo fin es distinto de ella misma.
Según Aristóteles no hay virtud moral sin prudencia, porque cuando ésta falta no se atina con el bien o lo conveniente; pero tampoco hay prudencia sin virtud moral, pues sólo el virtuoso tiene como fin una vida buena y la prudencia delibera acerca de los mejores medios para alcanzarla.
Seguidamente se ocupa de la relación particularmente estrecha que existe entre la moderación y la prudencia, de suerte tal que el significado de la primera sería el de salvaguardar la segunda. Ello es así porque la templanza es aquella virtud moral que consiste en el justo medio entre dos extremos o vicios
El juicio propio de la prudencia es la opinión. De las partes racionales del alma, es la razón práctica la que se ocupa de las acciones y como las acciones son contingentes, los juicios que le son propios son opiniones que, no obstante, han de estar fundadas en razones.
 En cuanto a la relación con el arte, que también trata de lo contingente, además de la diferencia ya establecida de que el arte se ocupa de la producción que tiene su fin en otro y la prudencia con la acción, que tiene su fin en sí misma, cabe destacar que, según Aristóteles, hay una excelencia del arte pero no de la prudencia.
3. TEMAS.
3.1 VIRTUDES MORALES E INTELECTUALES.
Para Aristóteles está el fin natural del hombre es la felicidad y de que ésta radica en el ejercicio de la virtud. En general, la virtud de cualquier cosa, su excelencia propia, consiste en su capacidad para desarrollar la función que le es propia. La razón aquí reflexiona en situaciones concretas para encontrar el justo medio que es la virtud respecto a ciertas pasiones y acciones, pues los extremos tanto por exceso como por defecto son males o vicios. La virtud moral no es mediocridad sino lo más excelente. El rechazo del exceso y el defecto y conservación de la medida debida como garantía del bien fue una idea que Aristóteles compartió con Platón:
En el texto Aristóteles dice que las virtudes intelectuales son “las disposiciones por las cuales el alma posee la verdad cuando afirma o niega algo”. (Hay tres tipos de alma: vegetativa, sensible y racional. Tres son las partes racionales del alma: una es la razón teórica o contemplativa cuyo objetivo es el descubrimiento de la verdad entre cuyas virtudes se encuentran la ciencia, la intelección y la sabiduría, otra es la razón práctica que se ocupa de las acciones y cuya virtud es la prudencia y por último tenemos la razón productiva, relativa al arte). Las distintas virtudes intelectuales se distinguen por su objeto y por su método:
Ciencia: el método es la demostración cuyos resultados son conclusiones de validez universal; el objeto es lo necesario, ingénito e imperecedero.
Intelección: el método es una cierta aclaración que no llega a ser demostración; el objeto es lo necesario, ingénito e imperecedero.
Sabiduría: Es el resultado de la unión de intelección y ciencia.
Prudencia: El método es la deliberación cuyo resultado son decisiones de validez particular referidas a fines y medios.
Arte: El método es la deliberación; su objeto es lo contingente, pero entendido como acción productiva que no es en sí misma su propio fin.
En un orden jerárquico podemos decir que el arte se supedita a la prudencia y ésta a la sabiduría.

3.2. VIRTUD Y FELICIDAD.
 El objeto de la ética es definir el bien supremo, el fin último de la actividad del hombre: hay necesariamente un objeto absoluto de la voluntad que perseguimos por él mismo y por encima de todo, respecto del cual todos los demás fines no son más que medios; ese bien supremo es además un bien perfecto. Aristóteles reconoció que la virtud o la excelencia del hombre consiste en su aptitud para la vida razonable; reside para cada cual en una disposición permanente para comportarse razonablemente. Por una parte tenemos la virtud moral que es una disposición del carácter y, por otra parte, tenemos la virtud intelectual que es una disposición del entendimiento al descubrimiento de la verdad.
El placer no puede identificarse con el bien, pues hay placeres vinculados con conductas censurables y hay fines que merece la pena buscar aunque no proporcionen placer, pero esto no significa que el placer se oponga absolutamente al bien. Aristóteles ha reconocido que la actividad propia del hombre es la actividad del alma razonable, el placer más conforme con el ser humano y que le hará plenamente feliz consistirá en el ejercicio de la virtud. Para asegurarse de que la verdadera felicidad del hombre reside en la práctica de la virtud, basta invocar el testimonio del hombre virtuoso. Éste, no sólo encuentra placer en los actos de virtud.
Si la felicidad reside en el ejercicio de la virtud y la virtud más perfecta que nos asemeja a la vida divina es el ejercicio de la sabiduría, entonces en esta virtud radicará la felicidad más perfecta, en una actividad contemplativa. En efecto, de todas las actividades racionales del alma, ésta es la más pura, la que causa la menor fatiga y puede ejercerse de manera continua y con plena suficiencia. En primer lugar, si la virtud moral encuentra en sí misma su premio, no se ejerce sin embargo sin aplicarse a algún fin exterior a sí misma: el justo encuentra su gozo en la práctica de la justicia, dedicándose a una causa justa que le es preciso encontrar.
Pero la felicidad además de la virtud exige una serie de bienes exteriores como la salud, bienes de fortuna, satisfacciones familiares, amigos, etc. La suerte cuando nos es adversa hace fracasar la felicidad aunque no sea más que porque entorpece nuestras actividades, pero, por otra parte, incluso en esas circunstancias el hombre virtuoso sacará provecho, actuará según sus posibilidades de ser razonable y por ello, aún en el infortunio, no será desdichado.
Por último, para que la felicidad sea perfecta, no basta, nos dice Aristóteles, que la virtud se ejerza ocasionalmente, sino que es necesario que su actividad llene la vida entera: una golondrina no hace verano. La felicidad no es perfecta sino a condición de que sea constante.

 4. CONTEXTUALIZACIÓN.

Contexto filosófico: Influencias :

 La teoría ética de Aristóteles se puede considerar como una respuesta crítica a otras tres teorías, a saber: la de los sofistas, la de Sócrates y la de Platón.
 1) Crítica a los sofistas.
 Los sofistas en el siglo V sostuvieron una teoría relativista en moral que se sustenta en dos ideas:
a)       No se puede hablar de lo bueno absolutamente, es decir, con independencia del individuo y de las circunstancias en que este se encuentra. Lo que es bueno para uno puede ser malo para otro y la inversa.
b)        No hay nada bueno ni malo en sí mismo, sino que es el pensamiento el que lo hace tal.
 Para Aristóteles aunque el bien se dice de múltiples maneras como el ser, hay sin duda el bien que es propio de la condición humana y que consiste en la perfección de su razón. El bien, no es relativo a la persona o al contexto, sino que podríamos hablar de una noción de bien universalizable, aquella que nace del sentido común.
 2) Crítica a Sócrates.
 Sócrates se opuso al relativismo moral de los sofistas y sostuvo una teoría que se conoce como intelectualismo moral que se distingue por afirmar:
 a) la virtud es conocimiento, es decir, conocer la virtud es lo mismo que ser virtuoso.
 b) No es posible conocer la virtud y ser malvado, es decir, siempre que se obra mal, se obra así por ignorancia; nadie es malo por propia voluntad.
 Según Aristóteles, Sócrates no tiene en cuenta la debilidad de la voluntad, la falta de autocontrol, la incontinencia, el efecto del apetito o la pasión.
3) Crítica a Platón.
Platón afirma la existencia de dos mundos: uno de las Ideas y otro de las Apariencias. Sólo el primero es verdaderamente real y está presidido por la idea de Bien. En tanto el mundo sensible es una mera copia de aquel.
Aristóteles, rechazó de Platón, la teoría del dualismo, ya que según él no puedes separar radicalmente las Ideas de los  objetos, si previamente se ha dicho que el origen de los objetos son las propias ideas.
Su influencia ha sido amplísima y se dejó sentir sobre todo en la cultura medieval, Aristóteles: fue el filósofo que mas influyo en la forma de pensar de Santo Tomas, estos son los conceptos más importantes que tomo de él, pero matizados por su concepción cristiana de la realidad:
Ontología: Toma los conceptos de forma/materia, acto/potencia, sustancia/accidentes, conceptos a los que Santo Tomás añade la oposición metafísica esencia/existencia y Dios como fundamento último de la realidad.
Teología natural: Adopta sus teorías principalmente en la primera, segunda y quinta Vía, pero también en la concepción de Dios como motor inmóvil, acto puro y forma inmaterial.
Filosofía de la naturaleza: Coge de Aristóteles su descripción del mundo físico.
Teoría del conocimiento: Igual que aquél, da primacía a la experiencia en la fundamentación del conocimiento, aunque éste no se limita a lo dado a los sentidos: podemos conocer las realidades trascendentes.
Antropología: concepción biologista del alma, división tripartita del alma: vegetativa, sensitiva e intelectiva, aunque Santo Tomás defiende con más claridad la inmortalidad del alma espiritual individual.
Ética: el concepto y la clasificación aristotélica de la virtud, pero Sto._Tomas añade las virtudes sobrenaturales.
Política: emplea las ideas de Aristóteles sobre la ley natural, y las completa con la referencia a la ley eterna.
Aún hoy Aristóteles está presente en la doctrina de la Iglesia Católica a través de la escolástica medieval.